Primavera de 2006
La mejor del 2006
Durante todo el 2006 tuve varias incursiones gateriles, pero como siempre hay una que se destaca del resto, y esto fue lo que paso con esta criatura.
Después de verla en distintas paginas que ofrecen servicio de escorts, me atreví a llamarla para realizar un encuentro.
Me atendió una asistente, la que concertó con migo el tipo de servicio y el arancel de la señorita, obviamente el lugar del encuentro y la hora.
Una vez pactados todos esos detalles me dirijo a la zona del encuentro, unos minutos tarde, la observo llegar caminando con el estilo que tienen las modelos en una pasarela, físico privilegiado, 1,75 mts de altura, enfundada en un finísimo traje color verde petróleo, la cabellera rubia enrulada, y unos anteojos de sol que no permitían ver sus hermosos ojos verdes.
Subió al coche, nos saludamos con un beso en la mejilla, y partimos raudamente a un hotel alojamiento de la zona.
Dentro de la habitación no dejaba de sorprenderme, la joven tenia una magnifica figura, no bien comenzó a quitarse la ropa pude ver una cintura perfecta, unas caderas que parecían dibujadas un maestro de la pintura. Ni hablemos de su cola, perfecta y cuidada por donde se mire, siguiendo hacia la parte superior, sus pechos se mostraban turgentes duros, generosos, abundantes, una obra maestra del cirujano plástico.
Sus cabellos enrulados y rubios voluptuosos, hacían completa la vista de un cuerpo de 10 puntos.
Cabe destacar que mientras me duchaba apreciaba todas las bondades estéticas de esta hermosa hembra.
Me recosté en la cama, boca arriba y le pedí que se hiciera cargo de la situación, ya que me encontraba algo cansado y buscaba un momento de realx.
Se acostó a mi lado y comenzó con unos suaves masajes por todo mi cuerpo, luego con su boca comenzó a recorrer desde mi cuello hasta mi pene, allí se detuvo, se dedicó a lamer con suavidad mis testículos, coloco un preservativo en mi pene y se lo trago literalmente, lo succionaba de una manera espectacular, con una calidad pocas veces vista en una escort.
Luego de estar un largo rato estregado a la maravilla de su felatio, optó por sentarse sobre mi pene, mientras sostenía sus nalgas veía como mi miembro penetraba lentamente por su vagina hasta desaparecer dentro de Jessica, (nos había mencionado que se hacia llamar Jessica).
En esa posición disfrute de su cuerpo por varios minutos, luego se recostó sobre mi, quedamos frente a frente, no pude resistir la tentación de besar sus labios, ella se dejo llevar y nos besamos apasionadamente.
Ya las cosas iban tomando una temperatura por demás elevada, crucé una de sus piernas entre las mías, siempre sin dejar de penetrarla profundamente, y le pregunté si me iba a dejar penetrarla por la cola, entre gemidos me dijo que la cola era toda mía y que podía hacer lo que quisiera.
Le pedí lubricante para facilitar a penetración anal, ella me alcanzó un pomo de gel, coloqué una cantidad generosa en la punta de mi dedo mayor y comencé a jugar con su orificio introduciéndole de a poco el dedo, de pronto tomo un preservativo y me lo dio para que me lo ponga en el dedo.
Con el dedo enfundado procedí a introducirlo cada vez mas profundo sin dejar de penetrarla por la vagina, en un momento desde el interior de su ano frotaba mi pene con mi dedo.
El orifico anal estaba bien dilatado y lubricado, ella se coloco en cuatro patas, volví a lubricar su cola, y le adicioné a mi pene un poco mas de gel.
Apoyé mi pene en su orificio anal, al principio costaba, pero poco a poco fue penetrando y dilatando ese hermoso agujero, una vez que se introdujo mis movimientos fueron en aumento, no puedo relatarles con palabras la maravillosa vista que disfrutaban mis ojos, mi pene en su máxima expresión penetrando en esa cola perfecta, entrando y saliendo con absoluta libertad.
En esa posición saque e introduje mi pene en varias oportunidades, se podía observar el orificio anal de Jessica completamente dilatado, yo no dejaba de sostener sus nalgas que daban a la vista el mas maravilloso de los paisajes.
La penetración anal fue de antología, luego con sus piernas sobre mis hombros la volví a penetrar por la cola mientras sostenía sus nalgas y luego de frente besándola y succionando sus hermosos pechos.
Por un momento noté que la niña estaba un poco cansada, casi me había abusado de su cuerpo, allí decidí descasar un poco, cambiamos el preservativo, y con su dulce boca se encargo de deglutir suavemente mi pene hasta hacerme eyacular.
Cuando miramos la hora me había pasado en el tiempo pactado, casi al doble, se lo retribuí Jessica se lo merecía.
Ese encuentro hoy a la distancia, lo califico como el mejor del 2006, y a Jessica la mejor del 2006.
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